~First Love~

Duele~ Mi cabeza, mi corazón, mi cuerpo. Arde.

Mi cabeza sólo piensa en olvidar esto. Tus ordenes, tus caprichos, tus jadeos, tus gemidos, tus caricias, tu piel, el color negro profundo de tus ojos contrastando con el brillo que hallé en ellos, tu sonrisa, tus labios...

Rodeó mi cintura con sus brazos como siempre hacía. Odié sentir su rostro apollado en mi espalda mientras oía sus sollozos, tan cerca...¿acaso era yo el culpable? Sólo hice lo mejor, lo que mi cabeza me dictó.
Quería llorar, abrazarle , sentir su tacto, pero solo solté sus brazos , apartandolo aparentándo frialdad.

-Te quiero Yuto.- Mentira. Todo mentira. ¿Le besaba igual que a mi? Seguro ¿le decía que le quería? sin duda alguna ¿le engañaba a el también conmigo? Obvio.

-Chinen ... vete. -sonreó de medio lado pesadamente. Negó acercándose a mi, haciendome retroceder, acarrolándome contra la pared.

-Te quiero.- susurró en mi oído. ¿Porqué tenía que conocerme tanto? ¿Porqué?

Mi corazón odiaba esa parte de mi, esa que se volvía débil con una sóla palabra que proviniese de tu bocam esa que no era capaz de negar lo que sentía.

Besó la comisura de mis labios.

-Te quiero. -volvió a decir. Miré directamente a sus ojos, brillaban de igual forma que el día en que le conocí. Demasiado....Demasiado... Besé sus labios lentamente, saboreandolos, disfrutándolo. Le abracé de la cintura pegándolo a mi cuerpo y suspiré hundiendo mi cabeza en su cuello.

 -Por favor... vete. -susurré en voz baja, aunque lo suficientemente alto como para que fuera capaz de oirlo perfectamente.

Pero no... Agarró mi cara entre sus manos, consiguiendo que le mirase directamente.

-Yuto... os quiero a ambos. -cerré los ojos lentamente. ¿Porque tenía que ser a ambos? ¿Porque no podía ser a mi? ¿porqué? ¿Porqué?. Me separé de nuevo de el, decidido a salir por la puerta. Si aquello no lo acababa el, lo acabaría yo.

-Te amo. -dijo, haciendome girar para verle el rostro de nuevo. -Dimelo, me lo prometiste.- No sabía que responder, que hacer... como se supone que debía actúar, de verdad me sentía la persona más imbecil. Hasta que obtení la respuesta... Se había acercado de nuevo a mí, acercando su oreja a mi boca, esperándo que de ella saliesen aquellas palabras. Cerré los ojos fuertemente antes de decir aquello.

Siento haberlo publicado sin permiso~ 

Anata wa kono kimochi wo... shitteru ne?
Ja...

Nande?...

~Watashi...~

Watashi wa... ureshi... Kara~ 

~¿Existe una yo para mi?~

Poco a poco, con mi extrema lentitud, con mis pequeños pasos... Me voy entendiendo a mí misma...

Hoy he entendido el ''soy rencorosa; no lo soy''. No lo soy... No lo he sido nunca... Incluso cuando algo me ha dolido de verdad es demasiado fácil hacerme olvidar... Y por eso siempre ha sido demasiado fácil hacerme daño, por esa razón... Ahora me siento completamente incapaz de perdonar... Siento ''ya lo he perdonado en el fondo'' y al segundo siguiente estoy llorando, porque me siento tal herida como el primer día... Y entonces siento ''no puedo... No puedo olvidarlo, no puedo decir que he perdonado...'' Y es que si perdonara... Tengo tantísimo miedo a volver a ser herida de aquel modo... Que por más que me juren, rejuren y vuelvan a jurar me siento incapaz de poder olvidarlo algún día... Dolió tantísimo... Que ya nunca más volveré a arriesgarme a pasar por ahí... No perdonar duele en demasía... Pero como Yuti dijo una vez... ''El dolor momentáneo es más intenso pero más barato.'' Y es que arrancar una tirita de golpe siempre ha sido mejor que hacerlo despacio... ¿No es cierto?
A la larga dolerá mucho más... Si confías... Si confías dolerá hasta el fondo de tu corazón...

Suelo decir que con facilidad puedo ver a través de las personas. En realidad es así pero, para mí, cada persona es un mundo, un nuevo misterio que poco a poco, con gestos, palabras, miradas o movimientos, pausas al hablar me cuenta un poco más de ese oscuro secreto en el cual empiezo a ver luces que con paciencia empiezan a atarse... Sólo hay que mirar...
Pero, por supuesto el mayor misterio al que jamás me he enfrentado... Soy yo misma...
Sé que cada persona es distinta. Sé que cada persona es un mundo distinto, tiene sentimientos, vivencias, miedos, dudas y creencias distintas... Y aún así egoístamente siento que ser yo es mucho más complicado que para el resto... Para el resto de mi alrededor, por supuesto...

A menudo me pregunto por qué. Por qué no hay una ''yo'' para mí.
Cuando algo hace que sienta que no puedo dejar de llorar y por más que me gustaría sé que no tengo a quién acudir, me pregunto qué diría yo en este caso, qué haría, qué sería lo mejor... No trato de decir que soy mejor que los demás, no trato de decir que siempre tengo la respuesta correcta, sólo... Quisiera a alguien capaz de ponerse en mi lugar, alguien capaz de sentir lo que el otro siente tal y como yo lo hago... No tengo todas las respuestas, trabajo con hipótesis basadas en simples intuiciones a ciegas que hago a través de sentimientos que imagino gracias a las palabras de otros... Sentimientos que llego a sentir dentro de mí si me esfuerzo lo suficiente... Porque ¿cómo vas a poder entender, aconsejar o apoyar siquiera a alguien cuyos sentimientos no puedes entender?...

Alguien como yo... Jamás piensa una sola cosa, tampoco dos, ni tres... Piensa miles...Es agotador... No puedo quejarme de algo que me duele en lo profundo del corazón sin preguntarme: ''¿hasta qué punto tuviste tú la culpa? ¿por qué estás llorando? No culpes a otro tan fácilmente, tienes que pensar más, piensa, piensa, piensa, ponte en su lugar, tienes que ver todo si quieres ser justa, la verdad no es sólo la que tú sientes, la verdad tiene dos partes...'' Una y otra y otra vez de ese modo, pensar en ello mientras piensas si realmente eso es lo que debo hacer o si sólo conseguiré salir herida una vez tras otra de este modo mientras que el resto del mundo sólo piensa en sus propios sentimientos... Lo que al principio eran sólo dos caminos ''¿quejarse o no?'' se ha convertido en cuatro... ''¿quejarse o no? ; ¿plantearse esto o no hacerlo y simplemente hacer lo que siento?''

Siempre he sido así, siempre lo seré... Es algo a lo que tengo que resignarme... O quizás es algo a lo que ya me había acostumbrado pero... Antes no importaba realmente... Antes seguían existiendo esas preguntas pero... No en el 90% de los campos de mi vida...Antes tan sólo el 50% trataba de ser ''justa'' ''madura'' y el otro 50% tan sólo era feliz con aquellas personas que la hacían sentir tranquila, apoyada y en paz. Ahora tal sólo un 10% de esa tranquilidad existe... Pero no me siento apoyada en lo absoluto... Cuando estoy con ese 10% no existe esa reflexión constante, no existe el dolor intenso de cada día... Pero mi corazón pesa igualmente... Y ese 10% ha tenido que acostumbrarse a ello... A pesar de notarlo tan sólo han mantenido esa tranquilidad para mí... Es una de las cosas que más agradezco a día de hoy... Pero hablar con ese 10% o incluso tratar de mostrar cómo me siento no me hace sentir mejor en lo más mínimo... Aunque haga parecer que sí por agradecimiento y cariño... Nada me hace sentir mejor... Ni siquiera esos momento de tranquilidad...

Sin embargo sigo esperando alguien que... Por un segundo olvide todo lo que siente, por un sólo segundo... Me mire... Y sienta lo que hay en mi corazón, tan sólo un segundo... Tan sólo un segundo... Que alguien me preste su corazón... Tal y como yo hago...

No soy perfecta, ni buena... Pero de veras abro mi corazón al máximo cuando alguien me necesita... Lo abro sólo para esa persona... Doy todo lo que tengo si me lo pides...Ya que no tengo demasiado que ofrecer...

Tan sólo un segundo... Quiero a una ''yo'' también para mí...